Cofradía Cristo Crucificado y María Santísima del Silencio

  En estas semanas previas al mes de mayo, dedicado a la Bienaventurada Virgen María, la Cofradía presenta esta iniciativa basada en la elaboración de un corazón de flores para María Santísima del Silencio. Por ello, se invita a todos los devotos de Nuestra Madre a colaborar en su preparación, de manera que cada flor donada tiene un precio simbólico de 1€. El corazón estará a los pies de María Santísima durante el mes mayo.   La recaudación de esta iniciativa estará destinada al proyecto del palio de la Madre del Silencio. Los lugares en los que se pueden dejar los donativos serán la oficina GMS multiservicios (C/ Antonio Machado 103) y el taller de Víctor García (C/ Clemente Gosálvez 25).

Con motivo de la festividad de la Cruz de mayo, que se celebrará el día tres del próximo mes, la Cofradía quiere presentar esta iniciativa basada en la elaboración de una cruz de flores. Se invita a todos los devotos a colaborar en la preparación de la cruz por medio de la donación de las flores. Cada flor tiene un precio simbólico de 1€.   La cruz estará presente en el altar del Cristo Crucificado para el día de la festividad. La recaudación de esta iniciativa irá destinada al proyecto de restauración del dosel y mesa de altar del Cristo. Los lugares en los que se pueden dejar los donativos serán la oficina GMS multiservicios (C/ Antonio Machado 103) y el taller de Víctor García (C/ Clemente Gosálvez 25).

Cada Jueves Santo las luces de las calles de Torrevieja, por donde transcurre la procesión del Silencio, se apagan como señal de luto y recogimiento ante la imponente muestra de fervor, que un año más y debido a la pandemia no ha podido desarrollarse. Pero ello no ha sido óbice para que cofrades y costaleros, no hayan tenido la ocasión de rendir cultor a sus imágenes Titulares. Por un lado la imagen de María Santísima del Silencio, que este año celebra su 25 aniversario, junto a San Juan, desde hace unos días están expuestos en el taller donde se tallara, donde ha sido visitada estos días, pero ayer fueron centenares de personas las que visitaron el taller convertido para la ocasión en una capilla, donde el olor a incienso y la música religiosa, recreaban un ambiente de recogimiento que propiciaba escenas de sentimiento religioso inéditas, mientras en algunas ocasiones el suave repicar de los tambores, hacían emocionarse a muchos de los visitantes, hasta las lágrimas. Durante todo el d...